La automatización TI, también conocida como automatización de la infraestructura, es el uso de software para crear procesos repetitivos que minimicen o eliminen la intervención humana en tareas operativas dentro del entorno tecnológico.
El software de automatización sigue instrucciones programadas para ejecutar tareas, desde acciones simples hasta procesos complejos que se desencadenan automáticamente por eventos o comportamientos del sistema. Así, permite que muchas actividades que antes requerían intervención humana se ejecuten de forma autónoma. La automatización TI se basa en herramientas que definen acciones predeterminadas, activadas por disparadores externos como eventos del sistema, umbrales superados o cambios en la configuración.
Por ejemplo, mediante scripts en PowerShell que combinan comandos y variables, es posible automatizar tareas como el aprovisionamiento de máquinas virtuales o la realización de copias de seguridad. Estas herramientas pueden detectar problemas y ejecutar respuestas automáticas, como reiniciar tareas en otros servidores o restaurar configuraciones correctas.
Principales usos en entornos empresariales:
Administración de incidentes:
Automatiza la detección y respuesta ante fallos o eventos inesperados, acelerando la solución de problemas y reduciendo el impacto operativo y los costos.
Despliegue de aplicaciones:
Facilita procesos de integración y entrega continua, mejorando la velocidad, calidad y consistencia en la implementación de software.
Seguridad y cumplimiento:
Permite definir políticas de seguridad, monitorear su cumplimiento, detectar desviaciones y aplicar correcciones automáticamente, asegurando entornos más confiables y auditables.
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